Escasez de maíz blanco golpea al campo y a la economía.

DESTACADOAGRICULTURA

Citlali Hernández Jiménez

6/20/20252 min read

El campo mexicano enfrenta su peor crisis en una década. Mientras los productores de Sinaloa -el granero de México- luchan contra los estragos del clima y los altos costos, el país se ve obligado a incrementar sus compras de maíz blanco al exterior en niveles sin precedentes, poniendo en riesgo la soberanía alimentaria y la estabilidad de precios en productos básicos.

Los datos más recientes revelan que en los primeros cinco meses de 2025, México importó 4.3 millones de toneladas de maíz blanco, superando en un 160% el volumen adquirido en el mismo periodo de 2024. Esta situación ha generado un gasto adicional de más de 1,200 millones de dólares para el erario público, según estimaciones de la Secretaría de Hacienda.

Sinaloa, que normalmente produce alrededor de 5 millones de toneladas anuales de maíz blanco, enfrentó este año una combinación devastadora: la peor sequía en 30 años con un déficit de lluvias del 45% en el ciclo otoño-invierno, temperaturas récord que afectaron el desarrollo del cultivo, y costos de producción que se incrementaron un 35% por la escasez global de fertilizantes.

El impacto ya se siente en las tortillerías y la industria de alimentos. El precio del kilogramo de tortilla aumentó un 18% en zonas urbanas, las pequeñas empresas dedicadas a la producción de harina enfrentan márgenes de utilidad negativos, y los ganaderos reportan dificultades para conseguir forraje a precios accesibles.

El Dr. Ernesto Sánchez, investigador del CIMMYT, advierte: "Estamos ante un punto de inflexión. Si no modernizamos nuestros sistemas de riego y no desarrollamos variedades más resistentes, estos escenarios se repetirán con mayor frecuencia debido al cambio climático".

Mientras tanto, la SADER anunció un paquete de emergencia por 3,500 millones de pesos para apoyar a los productores afectados, aunque expertos consideran que esta medida llega tarde y es insuficiente.